AROUSAL o ACTIVACION PSICOFIOSIOLÓGICA Dra. Patricia Wightman Wortelboer. Se define como una activación general fisiológica y psicológica del organismo, la cual se presenta en forma de intensidades variables a lo largo de un continuo que se observa desde el sueño profundo hasta el frenesí, pánico o cólera intensa. Para el propósito de la competencia y el deporte, el arousal/activación será definido como una función energizante que es responsable del aprovechamiento de los recursos del cuerpo ante actividades vigorosas e intensas. TEORIA DE LA “U” INVERTIDA. La hipótesis de la U Invertida, se ha desarrollado para explicar la relación entre arousal/activación y rendimiento (Landers,1980; Oxedine, 1970). Según esta teoría, conocida anteriormente como ley Yerkes y Dodson (1908), al aumentar la activación se produce un incremento progresivo del rendimiento hasta un punto óptimo, pero cuando éste se supero, cualquier aumento en el estado de activación se traduce en una caída de la actuación.(Teoria de las 3 d´s) Por ello el rendimiento máximo se realizaría a un nivel intermedio de arousal, aunque es preciso considerar que la relación activación-rendimiento depende de las características de la tarea y del individuo. En términos generales, un nivel relativamente bajo de activación facilita actividades complejas desde el punto de vista cognitivo (con elevados componentes de decisión, como en los deportes de situación) o con elevado control motor ej. Tiro. Esto nos aclara porque en el control de doping el uso de los beta-bloqueantes se observa en deportes como el tiro donde el propósito es de bajar o espaciar el ritmo cardiaco para que el tirador pueda tirar entre latidos y así evitar el pequeñísimo reflejo del latido. Por el contrario, un elevado nivel de activación es adecuado para las tareas condicionales y no obstaculiza la ejecución de actividades con escasos componentes cognitivos y que no exigen un control motor fino. En muchos deportes, las exigencias motoras no son siempre las mismas, por lo que cada una precisa de niveles de activación específicas. En los deportes de situación el deportista debe ser capaz de modificar rápidamente su nivel de activación para adaptarse a los cambios de las exigencias (el remate en el voleibol se realizara con un nivel de activación mayor que en el toque) (1). También esto es cierto en el básquetbol. Un nivel de activación acompaña al driblando y hay otro nivel en el momento de hacer un tiro libre, en el tenis el juego de fondo de cancha tiene un nivel de activación y el saque otro. Relación de U invertida entre rendimiento y activación
No sólo es importante la cantidad de actividad sino si es interpretada positiva o negativamente. Importante: Si Ud. mueve la curva de la U invertida hacia la izquierda, va a bajar la activación pero esto va a ser apropósito para el deporte que esta realizando. Ej. Golf. Si corre la U invertida mas para la derecha va a tener un nivel general de activación mas alto, que seria mas adecuado posiblemente para el Rugby. Teoría del Drive y Teoría Wightman de las tres D´s Cuando el aumento de la activación sobre pasa el punto ideal en el rendimiento se produce una posterior reducción de la percepción, con la consiguiente exclusión de múltiples estímulos, tanto importantes como irrevelantes, y la disminución del rendimiento de acuerdo con la hipótesis de la U invertida (Weinberg,1989) La antigua Teoría del drive pensaba que a mayor activación mayor rendimiento…….sin limite. Pero sabemos hoy que a un nivel de activación muy elevado (el atleta esta “cebado” o “pasado de revoluciones”) aumenta también la posibilidad de distracción, puesto que la atención salta de una fuente de estimulo a otra, y en tal estado de confusión, resulta muy difícil discriminar las señales importantes. Esto ve claro en la Teoría de Wightman de las 3 D´s. Al estar excesivamente activado lo primero que pierde el atleta es la atención/concentración. 1) Desconcentración. La segunda es la coordinación 2) Descoordinación y la tercera es el control;3) Descontrol.
Cuando el Arousal esta sobre- elevado todo el organismo presenta una gran actividad del sistema Autónomo Simpático, sufriendo graves alteraciones en todos los sistemas de control de la homeostasis del cuerpo/mente;( teoría del drive). Otro factor que influye en la relación activación-rendimiento es el grado de habilidad del individuo. Para una misma tarea, el nivel óptimo de arousal de un principiante es inferior al de un deportista experto que logra niveles mayores de activación por motivaciones y tensiones emotivas que el principiante no logra graduar. El estado de óptimo rendimiento esta descrito por diferentes autores de varias maneras. Para Puni (1970), lo denomina estado de disposición combativa. El deportista experimenta intensas emociones que resultan agradables, pues cualitativamente son expresión de seguridad en sus propias fuerzas y en el éxito. Ante cada situación es capaz de utilizar todo lo aprendido de forma que si es superado no siente ninguna culpabilidad. Es capaz de dirigir hacia la ejecución los máximos esfuerzos musculares respaldados por la puesta en función de los máximos esfuerzos volitivos. Para Loehr (1990 el estado ideal de rendimiento, se caracteriza por una sensación de relajación y soltura, de calma, quietud interna, sin ansiedad o nerviosismo; una sensación de estar cargado energéticamente, de optimismo y actitud positiva; un sentimiento de goce y diversión en la competición.... El deportista está mentalmente alerta con una gran sensación de auto confianza y autocontrol emocional. Un estado de activación equilibrado para el rendimiento óptimo en situaciones especificas (fluir) puede conseguirse mediante experiencias y ejercitaciones. Un tirador, un nadador, o un tenista que se están preparando para empezar a jugar, entrenar o competir controlan la activación de modo individual según su personalidad y su estilo o técnica de jugar. La relación entre activación y ejecución para el optimo rendimiento es muy complicada y los atletas deben aprender y entrenar para tener la capacidad bajo presión de aumentar cuando se sienten sin energía, apáticos o paralizados de miedo o reducirla cuando están “cebados” o sobre-excitados. La clave de la activación esta en el autoconocimiento del atleta de su respuesta emocional. ¿Cómo soy yo cuando estoy bajo presión o cuando tengo miedo? Tamorri, Stefano, (1990) Neurociencias y deporte. Psicología Deportiva. Procesos mentales del Atleta. Editorial Paidotribo.Barcelona. Sin embargo cuando nos referimos a nivel de activación o arousal, este estado físico y psíquico no se asocia a sucesos agradables o desagradables en forma automática (causalidad lineal). Más bien está relacionado a una amplia variedad de factores predisponentes y situacionales, razón por la cual ofrecemos el siguiente gráfico que permite una primera aproximación a la generación de ACTIVACION –ANSIEDAD-ESTRÉS.